Hablemos de nuestro amigo, el trader. Ahora, imagina este escenario. Se despierta un día y decide que va a entrar en el mundo del trading. Ha escuchado todas las historias de éxito y hay montones de información gratis de trading y estás seguro de que tiene lo que se necesita para ganar en grande. Emocionante, ¿verdad?
Pero esto es lo que pasa con el trading: no es tan fácil como parece. Nuestro amigo trader pronto se da cuenta de que no está ganando tanto dinero como pensaba. De hecho, está perdiendo dinero a diestra y siniestra. Y ahí es cuando las emociones comienzan a aparecer.
Ahora, Carl Jung era un gran creyente en el poder de las fuerzas externas en nuestra psique. Y en el caso de nuestro amigo trader, la fuerza externa es el mercado. El mercado es impredecible y puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Es una fuerza que nuestro amigo trader no puede controlar, y esa falta de control es lo que lo está volviendo loco.
Nuestro amigo trader que comenzó para encontrar libertad financiera es ahora un esclavo del mercado. Está constantemente revisando su teléfono, mirando el constante cambio de precios y haciendo operaciones tanto como puede. Es adicto a la sensación de ganar, de estar haciendo algo con el grafico, pero las derrotas están empezando a afectar su salud mental y sus relaciones.
Pero aquí está la cosa: nuestro amigo trader tiene una opción. Puede dejar que el mercado lo controle o puede tomar el control de su propio destino. Puede elegir ser independiente y no dejar que el mercado dicte sus emociones, puede aprender a simplificar y seguir al precio dejando de pensar del mercado como una ciencia exacta que depende de el.
Al final, todo se trata de equilibrio. Puede disfrutar del trading sin volverse adicto. Y con la mentalidad adecuada, nuestro amigo trader puede convertirse en dueño de su propio destino. Por lo tanto, para todos los traders, recuerden respirar profundamente, dar un paso atrás y controlar sus emociones dejen de ver al trading con prisa sino con potencial que debe ser acumulado a través del tiempo. Porque cuando se trata de eso, no se trata de ganar o perder. Se trata del viaje y de las lecciones que aprendes en el camino para volvernos mejores personas en todos los aspectos de la vida y así merecernos las ganancias del trading.
